Algunos tiburones que se reproducen y crían en
aguas de Canarias:
Las islas volcánicas en medio del océano, son un lugar estratégico de refugio, alimentación y reproducción para los tiburones. En las islas Canarias muchos de
los adultos son difíciles de observar, ya que viven a mayor profundidad y
alejados de la costa. Sin embargo, algunas hembras adultas pueden realizar una
migración hacia aguas costeras para parir a su prole. La razón es alejar a las
crías del territorio de los tiburones adultos que intentarían comérselos. Estas
crías y juveniles de tiburones viven en aguas costeras sólo hasta que adquieren
un tamaño lo suficiente grande para no ser una presa fácil y empezar a explorar
nuevos territorios más alejados de la costa.
Tenemos
muchos ejemplos de reproducción que se pueden observar: como el tiburón Angel o
Angelote (Squatina squatina), que en
Canarias existen las mejores guarderías de toda Europa, observándose entre
mitad de primavera y mitad de otoño a miles de crías de 30 cm enterradas en la
arena de playas someras y protegidas del oleaje.
O
el tiburón Solrayo (Odontaspis ferox)
que vive en aguas profundas y sólo las hembras se acercan a la costa somera
antes del parto y es un acontecimiento único que sucede cada verano en aguas de
Canarias.
![]() |
Ficha biológica del tiburón Solrayo. Para información detallada del tiburón Solrayo y otros peces cartilaginosos de Canarias, te puede interesar el siguiente libro: Pincha Aquí |
También los tiburones martillo o cornudas (Sphyrna zygaena) se puede observar cada verano a hembras a punto de parir cerca de las costas tranquilas o incluso entrando a veces en los muelles.
Muchas
jaquetas como el tiburón galápago (Carcharhinus
galapagensis) también paren en nuestras islas, observándose a los juveniles
cerca de las costas tranquilas y batidas del norte.
El
cazón (Mustelus mustelus) es un
tiburón de aguas profundas, pero en verano y otoño se pueden ver sus crías y
juveniles refugiándose y alimentándose en aguas muy someras de playas de arena
batidas por el oleaje del norte, en muchas de esas playas conviven con multitud
de bañistas sin problemas.
Otros tiburones sólo están de paso, como el tiburón ballena (Rhincodon typus), cada vez más frecuente en las islas occidentales, debido al calentamiento progresivo del mar por el cambio climático.
En el
pasado, cuando los tiburones eran más frecuentes en Canarias y menos
perseguidos, se podían observar frecuentes congregaciones de cornudas y
jaquetas en determinados puntos de la costa, conviviendo incluso con los
pescadores locales. Sin embargo, en la actualidad la población de tiburones en
Canarias ha descendido en gran número y además temen al hombre que los ha
perseguido desde los años 60 hasta la actualidad.
¿Que razón habría para proteger a los tiburones?
La
protección de los tiburones permitiría la recuperación de sus poblaciones que a
su vez mantendrían la salud del mar en mejor estado, ya que limpian el mar de
peces enfermos y débiles que pudieran contagiar a otros. En definitiva, la
presencia de grandes depredadores ayuda a mantener el mar en equilibrio.
Los tiburones relacionados con actividades ecoturísticas ingresan cientos de millones al año!!!
Se ha
descubierto la gran atracción que siente el hombre por estos seres marinos tan
enigmáticos y mitificados como asesinos por numerosas películas de ficción. Sin
embargo, son animales muy tímidos y difíciles de ver, sino se les atrae con
cebo. Cuando los humanos interactúan con tiburones en su entorno natural, el
miedo inicial se convierte en puro asombro y disfrute al contemplar su perfecto
diseño y belleza al deslizarse por el agua. Además de la adrenalina que se
libera al estar tan cerca de animales grandes y salvajes, que hacen sentir a uno
tan pequeño y a la vez tan grande, por sentirse aceptado por los tiburones en su medio.